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Vida Consagrada nace en el seno familiar y las escuelas

Estudiantes de escuelas católicas rezan antes de iniciar su jornada educativa. Foto/VN

Las familias y las escuelas católicas como centros de educación en la fe y "fuentes" de vocaciones: es lo que se desprende de la encuesta realizada en Estados Unidos por el CARA (Center for Applied Research in the Apostolate), a petición de la Conferencia de Obispos Católicos (USCCB).

La encuesta publicada con motivo de la Jornada Mundial de la Vida Consagrada, que se celebra el 2 de febrero, abarcó a los religiosos y religiosas que profesaron votos perpetuos en 2020 en una congregación, una provincia o un monasterio con sede en Estados Unidos. 

Se encuestaron 172 religiosos y religiosas, de los cuales respondieron 55 mujeres y 57 hombres, para un total de 112. Los datos clave del informe indican que el 75  por ciento de los encuestados proceden de familias en las que ambos padres son católicos y el 84 por ciento son católicos desde su nacimiento. 

Casi la mitad de los encuestados religiosos (el 45%) asistieron a una escuela primaria católica, mientras que el mismo porcentaje del 38 por ciento se encontró para los que asistieron a una escuela secundaria o universidad católica.

Edad vocacional

Nueve de cada diez religiosos (el 89%) también recibieron el estímulo para considerar la vocación a la vida religiosa a través del testimonio de un párroco, un amigo u otra persona consagrada. En general, la vocación se sintió alrededor de los 19 años, mientras que actualmente la edad media de los religiosos entrevistados es de 38 años; el más joven tiene 24 años y el mayor 71. Por último, el 71 por ciento de los consagrados que respondieron a la encuesta son caucásicos, euroamericanos o blancos; el 13 por ciento son asiáticos; el 7 por ciento son afroamericanos y el 5 por ciento son hispanos.

Por su parte, Monseñor James F. Checchio, Presidente de la Comisión Episcopal para el Clero, la Vida Consagrada y las Vocaciones, pide a los fieles que renueven su gratitud a Cristo por el don de la vida consagrada. 

El testimonio fiel de los religiosos y otras personas consagradas que viven su vocación es poderoso – escribe el Prelado en una nota – con sus oraciones y apostolados, los consagrados nos dan un ejemplo del amor misericordioso de Cristo y, especialmente en estos tiempos inciertos y difíciles, nos muestran que Cristo es nuestro objetivo final".

Celebración Nacional 

En Estados Unidos, la Jornada de la Vida Consagrada verá, además de las celebraciones nacionales del 2 de febrero, las celebraciones parroquiales locales previstas para el fin de semana del 6 y 7 de febrero. Cabe recordar que este año el evento celebra las "Bodas de Plata": de hecho, fue instituido hace 25 años, en 1997, a instancias del entonces Pontífice Juan Pablo II. La Jornada se celebra junto con la Fiesta de la Presentación del Señor y se conoce también como "Candelaria" porque, a través de la bendición y el encendido de velas, nos recuerda que Cristo es la luz del mundo y que las personas consagradas están llamadas a reflejar esta luz en todos los pueblos. Vaticano News

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