La música es un recurso innovador y divertido para evangelizar en el salón de clase en esta época post-pandemia en que los niños tienden a estar un poco deprimidos, ansiosos, atraídos como un imán a su teléfonos y 'sumergidos' en las redes sociales con alto riesgo de manipulación. 

La buena música los distrae de las tentaciones, los enfoca en Cristo, les alegra, motiva y les da paz. 

Desde que Christian Leaños comenzó su ministerio musical en la escuela católica Saint Francis International, de Silver Spring, ha sido testigo del poder que tiene la música en la vida de los niños. "La música no solo entra en nuestras almas, sino que también permite que nuestras vidas se transformen", dijo el maestro de música. "He descubierto que involucrar a los niños en oraciones cantadas permite que sus voces sean instrumentos poderosos de Dios". 

Las clases de música en St. Francis son divertidas, innovadoras y basadas en la fe. El objetivo es enseñar música a los estudiantes a través de cantos apropiados a la fe católica “mientras alabamos a nuestro creador en diferentes idiomas”, explicó. La iglesia y escuela adyacente cuentan con fieles de diversos orígenes que hablan no solo inglés y español, también shona, swahili y hasta japonés. Esa diversidad los hace ricos en lo que se refiere a las expresiones de diversidad cultural.                                                         

Las clases de música se imparten a todos los estudiantes desde preescolar hasta el octavo grado una vez por semana durante 42 minutos. Además, los estudiantes tienen la oportunidad de unirse al coro infantil que canta en todas las liturgias de la escuela. El coro está formado por 45 alumnos de 4º a 8º grado y cuenta con el apoyo de algunos miembros de la banda percusionista de la escuela.

Leaños hizo eco de las palabras de la santa Madre Teresa de Calcuta: “No todos podemos hacer grandes cosas, pero podemos hacer cosas pequeñas con un gran amor”. Y considera que eso es lo que están haciendo en la Escuela Internacional St. Francis. “Es que todos son acogedores, solidarios, amorosos, solidarios, compasivos y comprensivos”, dijo el profesor incluyendo a los niños, maestros, empleados y a los frailes franciscanos de la parroquia San Camilo y Holy Name College.   

Afirma que la música es una fuerza muy poderosa en la vida de los estudiantes: Cuando están tristes, la música les da alegría, y cuando están deprimidos, la música les da vida. “Los estudiantes han compartido que la música simboliza la vida, la alegría y la felicidad”, dijo.  Leaños ha podido ver cómo los estudiantes se están convirtiendo en mentores de sus compañeros. Por ejemplo, cuando un estudiante tiene dificultades, a menudo otro estudiante interviene para ayudarlo. “Formar este coro ha creado un espacio seguro y una comunidad acogedora, donde los estudiantes encuentran pertenencia y se han convertido verdaderamente en una familia en Cristo donde todos somos iguales”, subrayó.

Leaños es un modelo para los niños y jóvenes inmigrantes, es un joven talento al servicio del Señor.

El también se desempeña como asociado pastoral de liturgia y música en la Iglesia Católica San Camilo y como director del ministerio de música hispana en la Catedral de San Mateo Apóstol en Washington, D.C. 

La escuela St. Francis International está localizada en el 1500 de la calle St. Camillus Drive en Silver Spring, Maryland 20903. Para mas informacion visite saintfrancisinternational.org/contact.html o llame al (301)434-2344.