La Universidad de Maryland y National Wildlife Federation han unido esfuerzos para desarrollar diversas iniciativas que faciliten el acceso de fondos federales destinados a enfrentar las injusticias ambientales y energéticas. Las comunidades minoritarias del Distrito de Columbia y del estado de Maryland serán los primeros beneficiados.
El primer objetivo radica en brindar asistencia técnica y orientación administrativa para las subvenciones federales, las cuales alcanzan un monto de 177 millones de dólares para ayudar a las comunidades desatendidas en materia ambiental. Agencia de Protección Ambiental (EPA) es la encargada de suministrar los fondos.
El segundo objetivo esta orientado a la capacitación de los activistas comunitarios que están comprometidos con el desarrollo de programas medioambientales, conservación, cuidado del agua, calidad del aire e integración comunitaria.
Sacoby Wilson, profesor de la Universidad de Maryland, dijo que la institución educativa se siente honrada en ayudar a liderar este importante esfuerzo de EPA y establecer una efectiva conexión con las comunidades que aprovecharan los recursos federales. “Es necesario apoyar su trabajo para abordar las injusticias ambientales y los persistentes problemas de salud pública”.
Adrienne Hollis, vicepresidenta de justicia ambiental y revitalización comunitaria de National Wildlife Federation, señaló que la cooperación con la Universidad de Maryland ayudará a las comunidades que han sido afectadas por la falta de acceso a las subvenciones y la asistencia federal. “Es tiempo de abordar las causas fundamentales y los efectos del racismo sistémico”.
Mariah Davis, subdirectora de Choose Clean Water Coalition, manifestó que muchas comunidades minoritarias no pueden enfrentar la injusticia ambiental sin tener acceso a agua potable. “Nosotros tenemos una red de más de 290 organizaciones sin fines de lucro en la región de la Bahía de Chesapeake y estamos complacidos de poder obtener recursos para ayudar a tener comunidades saludables, ríos y arroyos descontaminados”.
Es importante mencionar que en abril pasado el Gobierno aprobó la creación en el país de 17 Centro de Asistencia Técnica de Comunidades Prósperas de Justicia Ambiental, otorgándole un fondo de $177 millones de dólares. El Distrito de Columbia, así como los estados de Maryland, Pensilvania, Virginia, Virginia Occidental y Delaware conforman la Región III-EPA.
Entre las principales organizaciones de la Región III- EPA, involucrada en combatir las injusticias ambientales y energéticas, se destacan las Universidades de Maryland (Center for Community), Morgan State y West Virginia, Centro de Apoyo Familiar, Engagement Environmental Justice and Health, Environmental Finance Center, South Baltimore Community Land Trust, Overbrook Education Center y Sussex Health & Environmental Network/Sentinels of Eastern Shore Health.