A pesar de la lluvia y las bajas temperaturas decenas de voluntarios de la organización caritativa “Poor Robert's Mission” participaron en la repartición anual de pavos a las familias necesitadas y organizaciones caritativas afincadas en el Distrito de Columbia por el Día de Acción de Gracias y vísperas de Navidad.
Previo al inicio de la actividad, el cardenal Wilton Gregory bendijo los alimentos e invitó a todos los presentes a dar gracias a Dios por todo lo recibido en el presente año.
“Tengo cinco años participando en la bendición de esta actividad que es ejemplo amor y solidaridad. Reconozco el esfuerzo de todos los voluntarios, el entusiasmo de los jóvenes y la generosidad de los donantes que todos los años se acuerdan de las personas menos afortunadas”, expresó el cardenal Gregory.
Agregó que este año el trabajo de la organización caritativa “Poor Robert's Mission” permitirá atender los requerimientos de parroquias, iglesias, centros juveniles, refugios para personas sin hogar y diversas organizaciones comunitarias.
“En importante trabajar en nombre de Dios, unidos en el servicio y la oración para poder atender a miles de personas que necesitan alimentarse en estas fiestas”, dijo el arzobispo de Washington en el estacionamiento de la Basílica Nacional de la Inmaculada Concepción el martes 26 de noviembre.
Zachary L. Huke, presidente de la mencionada organización, explicó que la misión se estableció en el 2015 para continuar el trabajo caritativo que Bobby Abbo, quien comenzó en 1967, cuando él y algunos clientes del restaurante Roma decidieron recaudar fondos para una acción benéfica de las religiosas Little Sisters of the Poor.
“Este 2024 estamos entregando un total de 7.500 pavos y si tenemos en cuenta que de cada pavo se pueden alimentar 10 personas, eso nos indica que más de 75.000 personas podrán disfrutar de una comida saludable. Somos una organización enfocada en dar pavos a quienes los necesitan”, indicó Huke.
Entre el grupo de voluntarios, se encontraban estudiantes de las escuelas Gonzaga (Washington) y Mater Dei (Maryland), quienes madrugaron para ayudar en la tradicional repartición de pavos.
“Estamos felices de poder ayudar en una actividad en favor de las familias necesitadas. La solidaridad con nuestros semejantes es muy importante en estos tiempos modernos. Todos queremos vivir el Día de Acción de Gracias con Dios y de la mejor manera”, dijeron los jóvenes, a quienes soportaron con alegría la lluvia y bajas temperaturas de noviembre.
Monseñor Walter Rossi, rector de la Basílica Nacional de la Inmaculada Concepción, expresó su alegría y solidaridad por ayudar a las familias necesitadas del Distrito de Columbia.