Catholic Relief Services (CRS, por sus siglas en inglés), celebra este año el quincuagésimo aniversario de su programa "El Plato de Arroz", una campaña que combate el hambre no solo en países que sufren inseguridad alimentaria, sino también en los Estados Unidos, ya que, según indica su sitio web, "el 25% de cada donación se queda en tu comunidad para luchar contra el hambre y la pobreza, mientras que el otro 75% apoya la programación de Catholic Relief Services alrededor del mundo".
OSV News habló con William Becerra, asesor de compromiso hispano de CRS, quien explica que "el Plato de Arroz es una experiencia que ofrecemos a la comunidad católica para que viva la Cuaresma más intencionalmente, viviendo los pilares cuaresmales del ayuno, la oración y la limosna; pero a la misma vez, afianzando esta solidaridad global por los más necesitados en el mundo, por las personas que están experimentando la pobreza, el hambre y los cambios bruscos climáticos que están afectando a muchas comunidades".
"Es una experiencia cuaresmal donde la familia, las parroquias se pueden reunir y de una manera sencilla... van viviendo cada uno de los pilares, van orando por las necesidades de la Iglesia universal, por las personas que están sufriendo, pero a la misma vez van poniendo su fe en acción con las acciones (a las) que se nos invita en la Cuaresma", aseguró.
Para Becerra participar de esta iniciativa "todos los católicos en los Estados Unidos nos unimos y fomentamos la solidaridad global".
Becerra señaló que cualquier persona que desee participar de este programa puede ingresar al sitio web de CRS, conocer los detalles y descargar los materiales que están dispuestos en inglés y en español.
Generalmente, dijo Becerra, son las parroquias las que invitan a toda la comunidad a participar y "desarrollar esta conexión que hay de nuestra fe con todas las necesidades en el mundo". Él comenta que también las escuelas católicas participan de esta campaña como una actividad en época de Cuaresma.
"Nosotros ofrecemos un calendario que va guiando a las personas en la vivencia de la Cuaresma con acciones muy sencillas, pero a la misma vez muy concretas que van de alguna forma conectando los aspectos de la fe con las necesidades que estamos tratando de ayudar como Iglesia católica en los Estados Unidos a través de CRS", afirmó Becerra.
"Es lindo ver cuando todas las comunidades parroquiales de alguna forma preparan a sus congregaciones, a sus feligreses, a que de alguna forma pongan más intencionalidad", dijo Becerra quien agrega que "el aspecto comunitario es muy importante, no solamente porque vamos a poder alcanzar y llegar a más personas, sino por el sentido también católico de nuestra experiencia comunitaria. Somos un Pueblo de Dios en camino".
Becerra insta a la comunidad católica a sumarse a este programa para combatir el hambre en el mundo, para lo cual invita a la gente a ingresar a https://www.crsricebowl.org/es y conocer los testimonios de quienes son beneficiarios de esta campaña, los recursos disponibles e incluso recetas sin carne fáciles de preparar.
"Una vez usted tenga toda la información que de alguna forma le puede ayudar a argumentar con su comunidad, diríjase a sus líderes, al párroco que es una de las personas indispensables en esta decisión, pero también las personas involucradas en los ministerios, las personas encargadas de los programas de educación religiosa, de los que están trabajando en la catequesis, en los movimientos apostólicos", aseguró Becerra.
Para él, la práctica del Plato de Arroz es una experiencia positiva para las comunidades y movimientos apostólicos, en la medida que les permite reunirse con frecuencia, tener retiros y una acción misionera. "Muchos movimientos apostólicos abrazan la campaña como una actividad y se dedican, de hecho, se vuelven ellos lo que nosotros estamos llamando promotores, gente que está activamente promoviendo, presentando a la comunidad lo que está haciendo CRS a través del Plato de Arroz, invitando a la comunidad que viva la Cuaresma".
"Todas las personas que estén participando reciben no sólo la cajita, sino también el calendario que va a ir guiando muchas de las actividades. La cajita es simplemente la representación física de todo lo que vamos a estar viviendo, pero el calendario viene acompañado con momentos de reflexión, de oración, de conocer cómo el Plato de Arroz a través del trabajo de CRS ayuda a muchas personas en el mundo", indica.
Becerra explica que en 1975 en Allentown, Pensilvania, surgió esta iniciativa como "una respuesta ecuménica a través del liderazgo del monseñor Robert Coll, que no sólo involucró a católicos, sino a otras denominaciones cristianas para solidarizarse con las personas que estaban sufriendo la hambruna en África".
"Operation Rice Bowl", como se conocía a la iniciativa en ese entonces, fue adoptada en 1976 bajo la dirección de CRS en preparación del 41º Congreso Eucarístico. Los obispos de Estados Unidos votaron para que fuera el programa oficial de CRS en 1977, según la organización.
Para citar algunas cifras, en estos 50 años, explicó Becerra, este programa de CRS -- que cuenta con el apoyo de 12.000 parroquias y escuelas católicas de los Estados Unidos -- ha entregado cerca de $350 millones de dólares en ayuda internacional humanitaria.
Los tipos de iniciativas de CRS que son apoyadas por las donaciones del Plato de Arroz incluyen proyectos agrícolas ayudan a los agricultores a mejorar las cosechas, proyectos de salud materno-infantil ofrecen servicios de salud y nutrición, además de proyectos de educación proporcionan recursos y capacitación. "Cada año, tus donaciones ayudan a apoyar el trabajo de CRS en más de 120 países de todo el mundo", dice el sitio web sobre el Plato de Arroz.
Parte del trabajo de CRS también es fomentar el liderazgo local y ayudar a la economía local, señaló Becerra. "Entonces la idea no es simplemente enviar cosas que vienen desde aquí en los Estados Unidos, sino ayudarle a las personas localmente", dijo Becerra, quien agregó que "tenemos el compromiso de ayudar a las comunidades a que salgan adelante, a que florezcan y respondan a sus propias necesidades con sus propios recursos".