La economía y las empresas deben hacer las paces con la naturaleza, con el planeta, ha reconocido el presidente de Bosch para España y Portugal, Javier González Pareja, en una entrevista con EFE, en la que ha advertido de que "o trabajamos por un crecimiento sostenible o no habrá recursos para todos".
Fundado en 1886 en Alemania, Grupo Bosch, es un gigante mundial de tecnología y servicios que emplea a 429.000 personas y factura unos 91.600 millones de euros al año con la venta de componentes del automóvil, equipos industriales, electrodomésticos, sistemas de climatización o de automatización de edificios, dispositivos inteligentes conectados, etc
Crecer sí, pero no así
"Por su puesto que tienen que hacer las paces, y aquí cojo las palabras de Carles Navarro, director general de BASF, que dice que el futuro o será sostenible o no será porque vamos al agotamiento de los recursos", ha respondido a la pregunta de si empresas y planeta deben hacer las paces y qué futuro nos espera si no lo hacen.
Como buen economista, ha tirado de números para explicar por qué debemos cambiar de modelo económico:
"Pensemos en China y en el número de coches por habitante. China es un país con 1.300/1.400 millones de personas. Ahora tienen ciento y poco coches por cada 1.000 habitantes, mientras que el estándar europeo está en 500 coches/1.000 habitantes (uno por cada dos). Imaginemos, y es una aspiración lícita, que lleguen al estándar europeo... la industria de automóvil estaría años y años solo produciendo para el mercado chino".
Si el consumo de electricidad de todos los ciudadanos del mundo fuera el mismo que el de los estadounidenses, pues, sencillamente, no habría centrales suficientes para generar toda esa energía, igual que no hay fábricas que puedan producir para que haya un coche por cada dos personas en todo el mundo.
"Las empresas, la sociedad, tienen que crecer, sí, pero ese crecimiento o es sostenible o no hay para todos y eso lo tenemos que ver", ha insistido.
Empresas: hacer un uso responsable de los recursos
"Tenemos que actuar para conseguir la sostenibilidad del medio ambiente. Nuestro sistema productivo y de consumo se basa en una extracción masiva de recursos que lleva a una producción masiva y a un consumo que están agotando los recursos naturales y que generan problemas como el cambio climático, la contaminación y que afecta al agua".
Por eso, las compañías deben ser capaces de adoptar modelos de economía circular que promuevan un uso responsable de los recursos, ha aseverado.
Para contribuir a este objetivo, en Bosch se centran en aquello sobre lo que pueden influir: reutilización de productos, disminución de emisiones o desarrollo de motores eléctricos, de hidrógeno o aptos para combustibles sintéticos; "independientemente de que luego el político A o B diga: pues esta es la regulación".
Consumidores: aguantar más los productos
Pero no sólo tienen que actuar las empresas, los consumidores deben cambiar sus hábitos. Debemos preguntarno, por ejemplo, qué cantidad de ropa tienen y qué cantidad de ropa tenían sus padres, por qué cambiar de lavadora o de coche antes de agotar su vida útil o por qué estar en casa en manga corta en invierno elevando así el consumo de calefacción, ha dicho.
"Creo que, como sociedad, como consumidores, tenemos que poder aguantar más con los productos que tenemos. Cada uno puede hacer mucho", ha aseverado.
Reducir emisiones y circularidad
En relación a qué requisitos mínimos debe reunir el crecimiento para ser sostenible, el primero es cumplir con todos los acuerdos para que el calentamiento global no supere los 1,5 grados reduciendo emisiones, y el segundo, que las empresas, voluntariamente o impulsadas por la regulación, apuesten por una "economía sostenible y circular".
"Si no hay otro método, pues tendremos que irnos a la prohibición", ha apuntado González Pareja, que, a modo de ejemplo, ha mencionado la decisión de la Unión Europea de prohibir la venta de vehículos nuevos que emitan CO2 a partir de 2035.
"No sabemos qué va a ocurrir cuando nos estemos acercando, si ser relejará o no la normativa (...) pero que se haya aprobado está llevando a la industria de automóvil y a la industria auxiliar a innovar más en ese sentido", ha subrayado el directivo, que aboga por la neutralidad tecnológica para lograr ese objetivo de coches cero emisiones (electricidad, hidrógeno, combustibles sintéticos...).